Calvario y tabor
El librero: sugerencias literarias
Por Ney Antonio
Salinas
Título: Calvario
y tabor
Autor: Vicente
Riva Palacio
Se trata (desde
mi punto de vista) de la novela más notable de un autor que al paso de los años
y del devenir de la Historia de México, se ha convertido en un gigante;
publicada en 1868. Periodista, militar, historiador, dramaturgo, novelista,
poeta, impresor. Y por si fuera poco, héroe nacional; desde los quince años de
edad, cuando se dio la invasión norteamericana a México organizó a guardias
civiles en el área de Chalco, para plantar batalla a los invasores. Hombre de
gran valor e inteligencia, testigo de primera línea en los episodios más peligrosos
de la naciente república mexicana. En su etapa de escritor consolidado, se da
la segunda intervención francesa (1862 – 1867), y ostenta grados militares que
le permiten organizar la resistencia en los estados de Michoacán y Guerrero, llegando
a ser general en jefe del Ejército Republicano del Centro, siendo presidente
legítimo Benito Juárez. Nieto directo de Vicente Guerrero, trae en la sangre el
fuego y el metal de su gran raíz, la gran responsabilidad de la Historia y el
sincero y ferviente amor a la patria. Estuvo presente en el sitio de Querétaro
que culminó con el fusilamiento de Maximiliano de Habsburgo. Pertenece a la
generación de intelectuales más brillante de la Historia de México, que no sólo
combate con ideas, también con las armas en pro de altos ideales, que los apasionados
de la Historia sabrán compartir conmigo estos entusiasmos. Éste breve recuento
histórico es muy necesario para abordar ésta novela, publicada a un año del
cese de las hostilidades y por entregas en el diario La Orquesta. El autor
narra los amores de una muchacha de la Costa Chica de Guerrero con un militar
republicano, intrigas y conjuras del clero, el mazo oscuro que aún doblega a
México con sus diferentes versiones de medioevo; la vida trashumante y heroica
de los combatientes, la batalla por resistir y salvar a México de la monarquía
a todo lo que daba, teatreros ambulantes y callejeros, pistoleros, escenarios
del México de la República restaurada. Una obra que no admite pausas, que en
cada página hace crecer la emoción y la adrenalina del lector porque Riva
Palacio trae de manera vívida esos tiempos de guerra, toda la pasión de su
pluma que desborda amor por la Historia, por la literatura, por registrar lo
que pasó en esos años dolorosos de nuestro México. Es una novela muy querida
por mí, que ocupa un lugar muy importante en mi biblioteca personal, un libro leído
y releído y que da para muchas tardes de lectura y de café y de nostalgia que
en más de un capítulo es muy capaz de arrancar las lágrimas y renovar el amor
por nuestra Historia de grandeza y heroísmo desmedido.
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